del
motor sin incrementar el consumo o, incluso, bajándolo ligeramente. Una
reprogramación personalizada puede aumentar la potencia hasta un 30% sin
riesgo para la fiabilidad, reducir el consumo hasta un 5% aproximadamente en
función de lo que quiera exactamente el cliente.
Los dos tipos de reprogramaciones existentes son recomendables para motores gasolina y diesel con turbo o compresor. En los propulsores que no emplean alguno de estos elementos, es decir, motores atmosféricos, no es recomendable porque la ganancia es muy pequeña y, en ocasiones, casi inapreciable.
Los dos tipos de reprogramaciones existentes son recomendables para motores gasolina y diesel con turbo o compresor. En los propulsores que no emplean alguno de estos elementos, es decir, motores atmosféricos, no es recomendable porque la ganancia es muy pequeña y, en ocasiones, casi inapreciable.
Las reprogramaciones de las centralita de coche se hacen siempre en empresas especializadas en reprogramaciones, pues este tipo de operaciones sólo pueden ser ejecutadas con garantía por expertos en centralitas, pues de lo contrario, se podría provocar una avería muy grave en el motor.
Si la reprogramación de la centralita de coche está bien hecha, es indetectable por la ITV, no habrá mayor problema.
A favor: No afecta a la fiabilidad, si está hecha por un especialista y no aumenta la potencia más de un 20-25% aprox, precio razonable, resultado muy notable en motores con turbo o compresor.
En contra: Se podría perder la reprogramación si en una revisión en un concesionario oficial, actualizan el software del motor, también se arriesgas a perder la garantía del coche si detectan que se ha modificado la centralita.
